Roberto Carcelén fue el primer peruano en participar en las Olimpiadas de Invierno en el año 2010 y esta vez fue un ejemplo a seguir debido a que decidió competir en esquí de fondo, su especialidad, a pesar de tener una costilla rota.

Cuando los medios le preguntaban por qué competiría, puesto que era riesgoso para su salud, éste solo atinó a responder : "esta es una gran oportunidad para inspirar a los niños (y todos en general) que necesiten de un buen modelo a seguir, un buen ejemplo, una historia inspiradora. Renunciar no es una opción" 

Roberto Terminó los 15 kilómetros en 1 hora con 6 minutos, un tiempo casi el doble que el hecho por el ganador de la medalla de oro. En el tramo final, Roberto levantó una bandera peruana, mientras los aficionados celebraban su perseverancia.

¿Cree que es un ejemplo a seguir?