La foto del refugiado sirio Abdul Halim al-Atta, que vendía lapiceros en las calles de Beirut (Líbano) con su hija en brazos, que se volvió viral en Twitter tuvo un final muy feliz.

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Abdul huyó de Siria junto a su familia por el conflicto armado que vive su país, su imagen publicada por Gissur Simonarson junto con un pedido de donación le cambió la vida. A través de la página web Crowdfunding se logró recaudar más de 200 mil euros.

Abrir un restaurante, un puesto de kehab y una panadería es lo que hizo el hombre con parte del dinero, gracias a este le dio trabajo a otros 16 refugiados. 

Como Abdul creyó que todo la plata era mucho para él, entregó 25 mil euros para ayudar a sus familiares y amigos, con el resto inició sus negocios y se mudó a una casa más grande en Beirut.

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Amazing article on how Abdul is doing now. So great to read this =)) #BuyPens https://t.co/6y2xk1DLsg pic.twitter.com/ZhJYdw0Pap

— Gissur Simonarson CN (@GissiSim) diciembre 3, 2015