La polémica conductora de televisión, Laura Bozzo, informó que siguen un tratamiento de rejuvenecimiento que consisten en inyectarse su propia sangre para eliminar las arrugas de su rostro. Según Bozzo, utiliza “la técnica de la sangre” siempre que visita el Perú, con el doctor Otto Cedrón. “ No me gustan para nada las cirugías porque los cortes te dejan cara de momia o de sorpresa. A mí mejor que me pongan Botox y métodos alternativos, me gustan las cosas naturales”, aseguró.

La autodenominada 'abogada de los pobres', quien recientemente estrenó exitosamente un nuevo talk show en Chile, aseveró que le gusta que la vean de su edad pero debe hacerse “algun tratamiento que la refresque” debido a que es una figura televisiva. “Tampoco quiero parecer una jovencita de 20 aumentándome atrás y adelante”, agregó.

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