Robert Fink estaba listo para dar un paso muy importante en su relación: pedirle la mano a su novia Angel White y para ello no tuvo mejor idea que crear un videojuego inspirado en los años 80 y dentro de él pedirle matrimonio. 

“He buscado por todas partes y enfrentado muchos peligros en busca de mi primera y única. Creo con todo mi corazón que yo te he encontrado. Angel White, ¿me harías el honor de compartir tu vida conmigo?”, aparecía en la pantalla.

Fink invirtió cinco meses escapándose con la excusa de que debía trabajar hasta tarde en un videojuego llamado “Knight Man” e hizo que su novia fuera a probar el videojuego. 

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